El director Craig Gillespie, reconocido por “I, Tonya”, ha triunfado una vez más, esta vez arrojando una luz brillante sobre las complejidades del mundo financiero, con “Dumb Money” se erige como un contundente impacto que, a pesar de su aparente extravagancia, revela una historia verdaderamente insensata de nuestro pasado reciente.
La experiencia de consumir “Dumb Money” me evocó lecciones aprendidas previamente a través de producciones como “The Big Short” y “The Wolf of Wall Street”. A pesar de los esfuerzos de los personajes por explicar las complejidades del mercado bursátil, la inmunidad a dichas complejidades persiste. Estas reflexiones no dejaban de rondar mi mente mientras contemplaba la obra del director Craig Gillespie. En “Dumb Money”, Gillespie logra entrelazar hábilmente elementos de ambas producciones mencionadas, narrando el fenómeno de la venta en corto de GameStop en enero de 2021.
En ese momento, un grupo de operadores aficionados se embarca en una lucha contra los gestores de fondos de cobertura, logrando enriquecerse mediante su poder de compra colectivo, todo a partir de un negocio que tiene sus raíces en los centros comerciales.
En el epicentro de esta narrativa se encuentra Keith Gill, apodado “Roaring Kitty” (interpretado por Paul Dano de “The Batman“). Este personaje, un empollón afable reconocido por su devoción a camisetas con gatos y por sus transmisiones en vivo desde su sótano, se ve inadvertidamente envuelto en una improbable cruzada. Su fe inicial en el negocio tradicional se transforma rápidamente en un esfuerzo colectivo para desafiar a los operadores de “dinero inteligente” y a los gestores de fondos de cobertura que buscan beneficiarse de la venta en corto de las acciones de GameStop.
El guión, sabiamente elaborado por Lauren Schuker Blum y Rebecca Angelo (guionistas para “Orange Is the New Black”), adaptado del libro de Ben Mezrich, “The Anti-Social Network”, no se limita a seguir los torpes intentos de Keith. La película hábilmente entrelaza las vidas de varios trabajadores y estudiantes descontentos que encuentran en Roaring Kitty y el fenómeno GameStop una vía para desafiar un sistema roto y, tal vez, obtener una porción del pastel que se les ha negado durante mucho tiempo.
Personajes como Jenny (interpretada por America Ferrera de “Barbie“), apodada StonkMom, una madre soltera de dos hijos luchando por mantener a su familia con su trabajo de enfermera; Marcus (Anthony Ramos de “Transformers: Rise of the Beasts“), un empleado de GameStop que apenas subsiste; y Riri y Harmony (Myha’la Herrold y Talia Ryder), universitarias que se unen a la causa de Kitty, ofrecen perspectivas adicionales sobre cómo los vídeos y publicaciones de Keith en el subreddit WallStreetBets desencadenan un movimiento inesperado y radicalizan brevemente a quienes participan.
“Dumb Money” se revela como la crónica definitiva de la lucha de David contra Goliat, basada en la asombrosa historia real de personas comunes que desafiaron el status quo de Wall Street, convirtiendo a GameStop, una modesta tienda de videojuegos, en la empresa más destacada del momento. Además, la película nos brinda una visión de aquellos que consideran a los pequeños comerciantes minoristas como inferiores.
Desde los creadores de la aplicación de compraventa de acciones Robinhood (interpretados por Sebastian Stan y Rushi Kota) hasta figuras como Ken Griffin (Nick Offerman de “The Last of Us”), Gabe Plotkin (Seth Rogen de “The Fabelmans”) y Steve Cohen (Vincent D’Onofrio de “Daredevil”), cada uno es presentado mientras la clase dirigente financiera se da cuenta gradualmente de que la campaña coordinada liderada por Roaring Kitty y sus seguidores podría costarles millones.
Lo que sigue es una lucha entre aquellos que tienen excesivamente (que dedican su tiempo a demoler la mansión de al lado para construir pistas de tenis) y aquellos que carecen de recursos (que prefieren no gastar dinero en una Heineken cuando una cerveza local serviría igualmente).
En un audaz recordatorio de cómo somos evaluados en el mundo financiero, cada presentación de estos diversos actores va seguida de su patrimonio neto. Este detalle, entre muchos otros, impregna “Dumb Money” con un sentido del humor bienvenido, manteniendo viva la sátira de la vida real. El elenco, encabezado por Paul Dano, ofrece interpretaciones destacadas.
Pete Davidson (“The King of Staten Island“), en el papel del hermano repartidor de DoorDash de Keith, aporta risas en momentos críticos, mientras que Ramos utiliza hábilmente su físico cómico en una de las caídas más épicas de la película. Rogen y Stan, por su parte, interpretan a personajes que se convierten en bufones risibles, cuya confianza inmerecida se ve igualada solo por su arrogancia. Shailene Woodley asume el papel de Caroline, la esposa de Keith, desempeñando un papel fundamental en mantenerlo arraigado y conectado con la realidad.
Sin embargo, es la interpretación matizada de Paul Dano, combinando melancolía de ojos abiertos con un humor inadvertidamente inexpresivo, la que mejor captura el tono de “Dumb Money”. La película se presenta como una farsa trágica exclusivamente estadounidense sobre los peligros y las promesas del capitalismo tardío. Esta historia solo puede contarse a través de la risa, una risa que disfraza la melancolía profunda que emana cuando la tienda de juegos exhala su último aliento. A medida que las tarjetas de título nos narran el destino posterior de los personajes, resulta inevitable expresar un gesto de incredulidad y desaprobación ante la impunidad que se exhibe.
La película proporciona suficiente información para mantenernos informados sin caer en una charla tediosa sobre inversiones en bolsa. Además, logra mantenernos plenamente inmersos en sus personajes y la historia que están contando. “Dumb Money” se revela como una obra inteligente, lúdica y eficientemente eficaz, una fascinante crónica de David contra Goliat, arrancada de los titulares y merecedora de ser vista para ser creída.
Si tienen interés en obtener información más detallada sobre “Dumb Money”, les recomiendo ver el documental de Netflix titulado “Eat the Rich: The GameStop Saga“. Este documental ofrece una exposición más completa de los acontecimientos que tuvieron lugar durante el período de la pandemia.