Netflix ha apostado fuerte por The Electric State, una película con un presupuesto de aproximadamente 320 millones de dólares, lo que la coloca entre las más caras de la historia. Dirigida por Anthony y Joe Russo, conocidos por su trabajo en el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU). Esta adaptación de la novela gráfica de Simon Stålenhag presenta un mundo visualmente fascinante, pero con una narrativa que no logra el mismo impacto.
Un Concepto Prometedor, Pero Con Ejecución Dispersa
El filme se ambienta en un universo alternativo de los años 90, donde la humanidad ha sido devastada por una guerra contra robots. Aunque estos no son el tipo de inteligencia artificial amenazante que solemos ver en el cine actual. La protagonista, Michelle (interpretada por Millie Bobby Brown), es una adolescente que se embarca en una búsqueda para encontrar a su hermano. Su conciencia parece haberse transferido a The Electric State. En su viaje, es acompañada por un contrabandista interpretado por Chris Pratt. Su personaje me recuerda demasiado a Han Solo y Peter Quill.
Si bien la estética de la película es impresionante, con robots que evocan las mascotas de parques temáticos de los años 50 y 60. Lamentablemente, el guion se siente superficial. La historia es más un collage de referencias a Star Wars, ¿Quién engañó a Roger Rabbit? y otras franquicias populares que una trama original y profunda.

Actuaciones Desaprovechadas y Poca Acción
A pesar del talento del elenco, que incluye a Stanley Tucci y Giancarlo Esposito, los personajes no tienen suficiente desarrollo. Pratt, que en otros papeles ha demostrado versatilidad, aquí se apoya en sus antiguos trucos de comedia. Mientras que Brown hace lo mejor que puede con un guion limitado.
A nivel técnico, la película es impecable. La fotografía de Stephen F. Windon y los efectos visuales son sobresalientes. La banda sonora de Alan Silvestri recuerda a sus clásicos de los años 80 y 90. Sin embargo, la falta de emoción y profundidad en la historia hace que la película se sienta como una experiencia pasajera más que un evento cinematográfico memorable.
Conclusión: Un Blockbuster Visualmente Impactante, Pero Olvidable
A pesar de su impresionante diseño de producción, The Electric State carece de la emoción y el impacto que se esperaría de una producción de esta magnitud. Netflix seguramente obtendrá buenos números de audiencia, pero difícilmente logrará el éxito a largo plazo que esperaba. Como sucedió con The Gray Man, otra producción de los Russo para la plataforma. Esta película es un espectáculo visual sin el alma que define a los grandes clásicos del cine de ciencia ficción. Aquí su tráiler.