Darren Aronofsky cambia de rumbo
Darren Aronofsky, conocido por obras intensas y estilísticamente únicas como Requiem for a Dream, Black Swan y The Whale, vuelve con una propuesta que desconcierta en el mejor sentido. Caught Stealing se aleja del estilo oscuro y experimental que caracteriza al director para presentar una historia de crimen urbano. Aunque más accesible, mantiene el sello de su cine.
Esta es su primera película desde The Whale, la cinta que le dio a Brendan Fraser un Oscar y lo devolvió al centro de la conversación cinematográfica. Con Caught Stealing, Aronofsky parece haber encontrado un nuevo espacio creativo. Un thriller criminal que funciona tanto como homenaje a una época dorada del cine de los 90 como una exploración de personajes atrapados entre su pasado y un destino violento.
Una trama que comienza con un gato y termina en el caos
Basada en la novela de Charlie Huston, la película sigue a Hank (Austin Butler), un exjugador de béisbol que alguna vez soñó con llegar a las Grandes Ligas. Ahora, en 1998, su vida transcurre entre las sombras de un pasado que lo atormenta y el trabajo rutinario en un bar neoyorquino.
Todo cambia cuando su vecino Russ (Matt Smith), un británico problemático, le pide un favor aparentemente simple: cuidar de su gato mientras está fuera. Ese gesto trivial es la chispa que enciende una serie de eventos descontrolados. Pronto, Hank se ve atrapado entre mafiosos rusos, un detective implacable interpretado por Regina King, un gangster explosivo encarnado por Benito Antonio Martínez Ocasio, más conocido como Bad Bunny. Además de los hermanos judíos, interpretados por Liev Schreiber y Vincent D’Onofrio, quienes buscan un objeto misterioso que creen que está en manos de Hank.
La película comienza como un relato clásico de crimen en Nueva York, pero rápidamente toma giros sorprendentes. Estos mantienen al espectador en un estado constante de tensión e incertidumbre.

Un thriller que evoca los años 90
Uno de los aspectos más llamativos de Caught Stealing es su tono nostálgico. Ambientada en 1998, la película no solo sitúa al espectador en una época específica, sino que revive el estilo narrativo de thrillers criminales de finales de los 90.
Con reminiscencias de los primeros trabajos de Guy Ritchie o películas como Payback de Mel Gibson, Caught Stealing ofrece un mosaico de personajes, historias entrelazadas y violencia urbana, todo tejido en un guion que sabe sorprender. Lo que podría haber sido un cliché se convierte en un viaje dinámico gracias a la solidez de la escritura y la dirección.
En un panorama actual donde el cine de crimen se ha trasladado más al streaming que a la pantalla grande, Aronofsky entrega un proyecto que se siente como un regreso a una época donde este tipo de historias dominaban la taquilla y luego vivían largas vidas en formato casero.
Austin Butler, en su papel más versátil
El verdadero corazón de la película es Hank, y Austin Butler se encarga de darle vida con una interpretación que confirma su versatilidad.
Conocido mundialmente por su papel en Elvis y más recientemente en Dune: Part Two, Butler sorprende aquí con una actuación más contenida, humana y compleja. Su Hank es un hombre común atrapado en circunstancias extraordinarias. Butler logra equilibrar carisma, vulnerabilidad, fuerza física y humor en una sola actuación, mostrando que puede ser tanto un astro carismático como un actor dramático de gran alcance.
Es un rol que se aleja de la espectacularidad de Elvis Presley o Feyd-Rautha y lo acerca a un terreno más naturalista, confirmando que puede cargar una película sobre sus hombros sin depender de personajes excesivamente estilizados.
Un elenco de lujo en papeles memorables
Si bien Butler es el centro de la película, el resto del elenco brilla con luz propia. Zoe Kravitz interpreta a Ivonne, una paramédica que se convierte en el ancla emocional de Hank en medio del caos. Matt Smith aporta un aire excéntrico y peligroso a Russ, el vecino que detona el conflicto.
Benito Antonio Martínez Ocasio, en uno de sus roles más destacados en Hollywood, interpreta a un gangster violento y carismático, confirmando que su incursión en la actuación no es pasajera. Regina King ofrece solidez en su papel como detective, mientras que Liev Schreiber y Vincent D’Onofrio destacan como hermanos mafiosos en busca de poder y control.
Incluso actores secundarios como Griffin Dunne enriquecen la atmósfera, conectando la película con la tradición del cine neoyorquino de Scorsese y compañía.

Dirección y estilo visual
El trabajo visual recae en Matthew Libatique, director de fotografía habitual de Aronofsky desde sus inicios. Su cámara captura el Nueva York de 1998 con una mezcla de crudeza y estilo retro, combinando la tensión de las calles con una estética vibrante que recuerda a los thrillers clásicos del género.
La dirección de Aronofsky mantiene el pulso narrativo en todo momento. Aunque la película parece más comercial que sus trabajos previos, logra infundirla de humanidad y un trasfondo temático que la diferencia de simples historias de crimen. Al centro, Hank no solo huye de mafiosos: también huye de sí mismo y de los errores de su pasado.
Nostalgia y relevancia en tiempos modernos
Una de las fortalezas de Caught Stealing es que, aunque se siente como un homenaje a los thrillers de hace más de 20 años, también resulta fresco y necesario en la actualidad. El género de crimen urbano ha perdido protagonismo en la cartelera contemporánea, pero Aronofsky demuestra que, con un guion sólido y actuaciones convincentes, sigue siendo un terreno fértil para contar grandes historias.
Si esta película se hubiera estrenado en 1998, probablemente habría sido un éxito de taquilla, con semanas de proyección y un recorrido largo en el mercado de video. Hoy, aunque las dinámicas de consumo han cambiado, Caught Stealing tiene todo para encontrar un público fiel tanto en cines como en plataformas de streaming.
Veredicto final
Caught Stealing es un thriller sólido, emocionante y lleno de giros que recuerda lo mejor del cine criminal de finales de los 90. Con un Austin Butler en estado de gracia, un elenco diverso y una dirección sorprendentemente contenida de Darren Aronofsky, la película se convierte en un ejemplo de cómo un género aparentemente gastado puede renovarse.
No es experimental ni abstracta como otras obras del director, pero sí demuestra su versatilidad. Con guion firme, personajes claros y un estilo visual impecable, Caught Stealing es una de esas películas que se disfrutan tanto en la sala de cine como años después en la comodidad del hogar.
Recomendación: imprescindible para quienes aman el cine criminal clásico y para quienes desean ver un Aronofsky distinto, pero igualmente efectivo.
Le compartimos su tráiler.